Por Marcos Calligaris
And the winner is… ‘¡El secreto de sus ojos!’
Las palabras de Almodóvar retumbaron en el Kodak Theatre de Los Ángeles y en lo más profundo de quienes formaron parte del histórico film de Juan José Campanella.
A miles de kilómetros, Soledad Villamil se enteraba por televisión. El Oscar a la mejor película extranjera sería para la protagonista “la consolidación de un camino”. Un camino trazado a fuerza de sacrificio.
Nacida en La Plata en el ‘69, Soledad se acercó al arte cuando era pequeña, estudiando varios instrumentos hasta que pronto conocería la actuación, una actividad que rápidamente se convirtió en su profesión.
Casi sin darse cuenta, la joven artista se encontró combinando actuaciones en teatro, cine y televisión, aunque la música nunca dejó de ocupar un lugar importante en su vida.
Luego de incontables temporadas teatrales, ciclos televisivos y no tantos protagónicos en la pantalla grande, llegó el llamado de Campanella y la avalancha mediática que generó la premiada película del director. Villamil aprovechó esa alta exposición para apuntalar su faceta más reciente, la de cantante.
Sin embargo la actriz se encarga de aclarar que su actividad musical ya se venía afianzando antes de ‘El secreto’. “Mi proyecto musical se venía consolidando con un primer disco que tiene un premio Gardel y buen reconocimiento, pero por supuesto que todo lo que tiene que ver con la repercusión de la película en alguna manera apoyará”, reconoce.
Mientras presenta ‘Morir de amor’ por todo el país y se prepara para cantar en Europa, Soledad se toma un tiempo para reflexionar sobre lo que está viviendo.
¿Cómo te definirías musicalmente?
Yo abordo un repertorio que tiene que ver con música popular rioplatense, ese rango de géneros musicales que van del tango a la milonga, el vals, la chamarrita, la ranchera y particularmente, en ‘Morir de amor’, al tratarse de un disco de canciones de amor, también hay un bolero y una copla española.
¿Cuáles son tus referentes musicales?
Lo que yo escucho y he escuchado toda mi vida es muy variado. Tiene que ver con el jazz, con la música clásica, con el rock, el pop. Yo no hago un repertorio de lo único que escucho, sino que trato que la música se vea reformulada con todo lo que ha ocurrido en estos últimos años y por lo que yo he vivido con respecto a otros géneros musicales. De todo, uno va haciendo una síntesis.
Sabés tocar varios instrumentos. ¿En los shows ejecutás alguno?
No, en el espectáculo soy cantante, interpreto canciones y el instrumento es mi voz. Estoy acompañada por un cuarteto de guitarras, percusión, contrabajo y bandoneón.
¿Estudiar música fue una decisión propia o alentada por tus padres?
Fue una combinación. Por un lado fue una decisión propia, pero siempre alentada y muy sostenida por mi familia, como todas mis elecciones artísticas. Por suerte me crié en un ambiente familiar en el que, al contrario de lo que puede ocurrir en otros casos, no resultaba mala palabra elegir alguna carrera artística.
Cine, televisión, música, teatro… ¿Podés elevar alguna de estas actividades por sobre el resto?
No podría elegir una cosa por encima de la otra. Yo me considero una artista intérprete que se vale de diferentes herramientas para desarrollar un trabajo y su arte. Todo va permitiendo que yo me desarrolle cada vez más.
¿Pero alguna actividad te causa más placer, o no se puede medir?
No, no se puede medir. En cada proyecto en que me involucro es porque realmente me genera un deseo y una pasión muy grande. Entonces, a la hora de estar haciéndolo, no es que está uno por encima del otro, simplemente son distintos momentos.
Por supuesto que la canción, que es algo que apareció en mi trabajo profesional hace algunos años y con respecto a la actuación es más nuevo, es algo que me hace muy feliz y estoy muy contenta de poder darle un lugar dentro de mi actividad profesional. Es un lugar de libertad muy grande y me da un placer muy grande. Creo que puede convivir muy bien con mis otros proyectos.
¿La idea es aprovechar el empuje que te dio ‘El secreto de sus ojos’ para consolidar tu carrera como cantante?
El proyecto musical ya tiene unos años. Se venía consolidando con un primer disco que tiene un premio Gardel y buen reconocimiento. Pero por supuesto que todo lo que tiene que ver con la repercusión de la película de alguna manera apoyará al proyecto. Eso se verá con el tiempo. Yo soy la misma persona.
¿Tu familia te acompaña en las giras?
Depende de la cantidad de tiempo y el tipo de viaje. En general voy sola, pero a veces se da la oportunidad de viajar en familia.
La vida después de un gran éxito
¿Cómo se sigue luego de llegar a la cima? Su actuación en ‘El secreto de sus ojos’ le valió a Soledad Villamil un premio Goya a la mejor actriz revelación y numerosos reconocimientos. La actriz y cantante analiza el antes y después de un éxito que recorre el mundo.
¿Cuánto cambió tu vida luego de ‘El secreto’?
La verdad que hubo y hay una movida muy fuerte en relación a la prensa y al interés periodístico a partir de los premios y de la película en general, desde el estreno, desde que sucedió este gran éxito.
Hubo un cambio importante. Yo lo tomo con mucha alegría y satisfacción. Hace bastante tiempo que trabajo y esto consolida un camino y me permite seguir tomando fuerzas para seguir haciendo lo que me gusta. Es un aliento importante.
¿El éxito te trajo algún aspecto negativo como la falta de tiempo con la familia?
Yo trato bastante de equilibrarlo, de organizarlo. Tengo un equipo de gente con el que estoy trabajando y por suerte me ayudan a darle un lugar a cada cosa y no volverme loca.
Por un lado está la familia, la vida personal y por otro están también los espacios de trabajo y de creación, que también necesitan su tranquilidad. Yo sigo trabajando con los músicos, en distintos proyectos, y el trabajo creativo es algo que me interesa sostener, sino la cosa se seca.
¿Crees que te van a preguntar por ‘El Secreto’ hasta que te mueras?
Sí, hasta que me muera…
¿Te molesta la idea de que este éxito pueda obnubilar lo que hiciste antes o lo que vayas a hacer?
No, para nada. Con ‘El secreto de sus ojos’ siento que se consolida algo. Yo me siento muy privilegiada de haber tomado parte de esa película, de ese elenco, de ese equipo. Porque todo lo que rodea a la película tiene carácter histórico, la cantidad de espectadores, el premio… Entonces no puedo más que sentirme orgullosa y feliz de haber sido parte de eso.
En el momento de participar en una nueva película, ¿sentís que la crítica te va a exigir un plus?
Yo nunca pienso en la crítica cuando elijo algún proyecto. Y en cualquier caso, tampoco hago tres películas por año. Siempre me he tomado mi tiempo y he sido bastante rigurosa conmigo misma en la elección. Rigurosa en sentir que el personaje, la película, el guión y el director me seducían lo suficiente como para involucrarme y poner todo ahí. Eso para mí no cambia. Desde mi última película habían pasado cuatro años y puede pasar el mismo tiempo para hasta que aparezca otra. No me preocupa.
¿Al leer el guión tenías la intuición de que podían pasar cosas importantes con esta película?
Por un lado te diría que sí. El guión era extraordinario y daba toda la pauta de que iba a ser una película importante, pero para nada pensaba que iba a ocurrir lo que sucedió. Eso nos sorprendió a todos, desde Campanella hasta cualquiera de nosotros.
¿Qué sigue ahora?
Básicamente quiero seguir trabajando con la música. Tengo una gira extensa por el país y en julio me voy a presentar en Europa. Se hizo una edición de mi último disco en España. Hay muchos viajes por delante. Y ya estoy pensando en grabar un disco para 2011.