Por Marcos Calligaris
La escritora cordobesa presenta en abril de 2011 su última novela, la esperada continuación de la Saga de los Osorio.
Cristina Bajo vuelve a darles vida a los Osorio. Su nuevo libro, ‘Territorio de Penumbras’, forma parte de la Saga de los Osorio, una serie que la escritora inició parar contar la guerra civil argentina que comenzó con el fusilamiento de Dorrego y concluyó con el exilio de Rosas.
Este tomo, el cuarto, es la continuación de ‘La trama del pasado’ y transcurre entre principios de 1841 y 1843, en lo que significó una de las épocas más sangrientas de nuestra historia.
¿Desde dónde aborda su nuevo libro?
Desde el punto de vista histórico, cuento la historia de la represión de Buenos Aires sobre las provincias que exigían constituir el país.
Desde el punto de vista de la trama, desentraño la vida de los personajes de ficción, donde habrá algunas muertes, varios amores, secretos develados, personajes nuevos rodeados de misterio.
¿Por qué se propuso escribir sobre este tema?
Mi intención es mostrar la historia argentina contada desde las provincias, no desde Buenos Aires, como generalmente nos llega. A los hechos sucedidos en el interior suele dárseles poca importancia, y a veces nosotros mismos -los provincianos- ignoramos lo que pasó en nuestra tierra. Me parece que hay que rescatar esas historias del olvido.
¿Tiene techo la Saga de los Osorio?
Probablemente continúe durante dos libros más. Seguramente el quinto tomo será más breve, ya que existen ciertos baches en la historia de nuestra guerra civil. El sexto tomo cerraría la saga, con la caída de Rosas y la finalización del sangriento ciclo de lucha entre unitarios y federales.
En la Comedia Humana, Honoré de Balzac retrató a lo largo 137 novelas e historias interconectadas, la sociedad francesa en un período que abarcó desde la Restauración borbónica hasta la Monarquía de Julio (1815-1830). ¿Es su intención dejar un legado realista sobre la sociedad argentina de aquel momento a través de la ficción?
Sí, justamente de Balzac tomé la idea de relacionar los libros y pintar un retrato de la sociedad con personajes que van desde las clases más humildes hasta las clases más encumbradas, pasando por toda suerte de funcionarios militares y religiosos. Mi propósito es plasmar un testimonio lo más verosímil posible de la vida privada del país durante aquellos años.
¿Se imagina sus historias reflejadas en el cine?
He tenido varias propuestas, que lamentablemente no se han concretado, principalmente por el alto costo que tendría una filmación ajustada al contexto histórico, ya que debería hacerse en diversas locaciones, en espacios abiertos, con coches antiguos, mobiliario y vestuario de época. Pero por suerte la gente que lo ha propuesto mantiene la idea en vigencia, por lo que no pierdo las esperanzas.
¿Cuánto tiempo pasó desde su última publicación?
Presenté ‘La trama del pasado’ (tercer tomo de la saga) en mayo del 2006, pero en el 2008 salió mi libro ‘Elogio de la cocina’ y este año se ha editado ‘La Madre del Agua’, un librito de leyendas argentinas muy lindo, para chicos.
Mirando estas fechas, me doy cuenta de que este libro se hizo esperar, porque la investigación histórica fue muy ardua y compleja. Mis lectores me han reclamado esta demora, y les agradezco su comprensión.
Suele trabajar en varios proyectos narrativos a la vez, esto sin contar que participa activamente en diferentes medios con artículos y opinión. ¿Cómo conviven todas las tramas y los personajes en su cabeza?
Desde niña he tenido la costumbre de leer varios libros al mismo tiempo, de temáticas diversas, y me he acostumbrado a seguir el hilo de diferentes tramas. Supongo que por eso no me cuesta demasiado convivir con distintos argumentos, personajes o proyectos bullendo en mi cabeza, aunque a veces se me hace difícil encontrar tiempo para atenderlos a todos.
¿Hay algún proyecto literario, como lo fue ‘Elogio de la cocina’, que rompe con lo que viene haciendo, y que tiene pendiente publicar?
Sí, tengo pendiente un proyecto que me inquieta, el de hacer una historia de la vida privada desde la época de la colonia hasta finales del siglo XIX. También tengo en mente, aunque no está concretada, la idea de un libro sobre la arquitectura de Córdoba. Espero poder llevarlos a cabo a los dos, porque son temas que me gustan mucho.
Cristina Bajo sigue convirtiéndose día a día en esa pluma que toda sociedad debería tener. La escritora incansable que recrea la historia desde un sinfín de aristas, con un sinfín de recursos.
La tinta indeleble que registra para siempre los sucesos que vale la pena no olvidar.